La planta, está destinada a la producción de bio-gas a partir de la fermentación de los residuos orgánicos obtenidos de la recogida selectiva municipal y residuos de productores específicos.
La transformación que sufre la materia orgánica en presencia de humedad y en ambientes sin oxígeno hace que se degrade esta materia y que se produzcan gases, mayoritariamente gas metano (el cual es utilizado como combustible para generar energía eléctrica). La materia resultante (digestado) es dirigida a las plantas de compostaje. Y el agua residual no reutilizada se destina a una unidad de depuración para su utilización posterior.